Un termistor de precisión en el tubo de extensión mide con precisión la temperatura del refrigerante. Un transductor de presión de precisión con compensación de temperatura, ubicado en el cuerpo del transductor, mide con precisión la presión del refrigerante. El sistema electrónico del cabezal del transductor convierte estas mediciones en un valor de sobrecalentamiento o subenfriamiento. Los datos de las propiedades refrigerantes del amoníaco se almacenan en el circuito base. Los datos de las propiedades refrigerantes de muchos otros refrigerantes, como el R22 y el R134a, se almacenan en llaves de refrigerante que se conectan a la placa de circuito dentro del gabinete eléctrico NEMA 4. Al conectar una de las llaves a la placa de circuito, el sistema electrónico utiliza los datos del refrigerante especificados por la llave, en lugar de los datos del amoníaco. El valor de sobrecalentamiento o subenfriamiento se convierte entonces en una señal de salida de mA. La salida de 12 mA corresponde a la saturación (es decir, sobrecalentamiento cero, subenfriamiento cero). 4 mA corresponde a un subenfriamiento de 30 °F (16,7 °C). La salida de 20 mA corresponde a un sobrecalentamiento de 30 °F (16,7 °C).